Este año, por fin, estábamos todos sanos sanotes, y nos disfrazamos los cuatro en parejas de dos. Itamar y Yaará iban de explorador y unicornio y Eliahu y yo de Mary Poppins y el deshollinador. Fue muy guay preparar los disfraces, sobre todo el de los peques. Me encanta hacer cutradas que luego resultan medio decentes y quedarme tan ancha y orgullosa.
Con nuestra salud dándolo todo salimos y fuimos a casa de unos amigos donde había otras familias, nos juntamos unos cuantos y disfrutamos mucho. Fue un día especial aunque pasamos un calor considerable por la mañana repartiendo regalos, pero nos lo pasamos de maravilla y creo que los peques también.