Pesaj

Pesaj
Hablar de Pesaj es fácil, lo dificil es resumirlo. Supongo que se podría limitar a "la fiesta de la libertad" pero no es solamente eso. Es la fiesta del amor de un Dios que no olvida y un pueblo que se ve arrastrado por las circunstancias. La fiesta de las grandes lecciones, de la lucha contra el mito de los dioses y la enseñanza de un mejor camino. El sabor agridulce de la libertad, la alegría del corazón, el canto sincero. Pesaj es un hombre que lo tuvo todo en sus manos pero con cada decisión labró un camino diferente, que creyó en un Dios que ardía pero no consumía. Es la prisa por dejar el pasado atrás, por la promesa de una tierra prometida.
Son siete días llenos de cambios empezando por la alimentación donde no se puede comer nada que contenga un alimento leudado (se va la mitad de la dieta de uno) y siguiendo por una noche diferente a todas las demás donde contamos la historia, larga y extensa, de lo ocurrido. Siete días que marcan el inicio de la cuenta hacia un hecho todavía más sublime: la recepción de la Torá. Es la libertad viniendo hacia nosotros siempre que sigamos caminando hacia ella.

¿Con qué Pesaj te quedas?

pesaj 2017

2017

El primer Pesaj de Itamar. Se acostumbra a que los niños aguanten lo máximo posible despiertos pero el nuestro tenía menos de un año, así que aguantar lo que se dice aguantar, pues poco. Nosotros disfrutamos por él mientras dormía y es que este año nos invitaron los mismos amigos que en Purim y nos enseñaron una forma diferente de enfocar la noche: poniendo a los niños como protagonistas.
De por sí es una fiesta enfocada a los niños a hacerlos participar y que se sientan parte de esa salida de Egipto, pero ellos lo centraron todavía más. Nos lo pasamos muy bien y pese al cansancio contra el que luchábamos por mantenernos despiertos se nos pasó rapidísimo. El resto de la semana fue muy tranquila, con pocas salidas y pasando todo el tiempo que pudimos en familia.